miércoles, 9 de septiembre de 2009
Hace unas semanas, mi papá se encontró una caja afuera de la casa. Estuvo a punto de patearla, pero la curiosidad pudo más y la recogió: dentro, halló a una ratoncita blanca de laboratorio. Cuando me la trajo, de inmediato noté algo raro… Parecía demasiado gorda. La miré más de cerca y me di cuenta de que definitivamente estaba preñada. Costó un poco convencer a mi mamá, pero al final igual dejó que la pequeña se quedara en la casa.
Algunos días después, nacieron 16 ratones y hasta compré una jaulita de cuatro pisos para que pudieran quedarse acá. El problema es que en una o dos semanas más, empezarán a procrearse y yo tendré una sobrepoblación ratonil >.<
¡Saludos!
PD: Que triste que alguien haya botado a una ratona preñada :/ Aprovecho de decirles que si adoptan un animalito haganlo con responsabilidad... Y no compren en tiendas, siendo que hay tantos animales sin hogar u.u
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